sábado, 27 de junio de 2009

La Poesia no tiene ligaduras


Jorge Cappato


La poesía no tiene ligaduras, no tiene compromisos, más que con su propio deseo de trascender todas las fronteras del espíritu. No tiene más ataduras que la impuesta por el propio peso de la inevitable limitación de sus alas. La poesía no tiene programas, no tiene otros propósitos que no sean los de multiplicar su propia belleza.


La poesía no tiene principios, ni dogmas, ni cánones, ni doctrina ni estatutos; sólo el fin de recrearse indefinidamente como los amaneceres y las noches, cuyo sentido está mas allá de nuestra humilde comprensión humana. La poesía no realiza oscuras componendas, ni pactos, ni tratados, con ninguna fuerza temporal ni terrestre; solo la anima una hermandad infinita con los vectores que imprimen su vuelo a las galaxias y reúnen y destejen los cromosomas.


No hay partido, no hay ideología, no hay secta ni movimiento alguno que pueda revestirse o engendrar acuerdos con la poesía. Ella es en sí misma la fuerza capaz de superar el inquebrantable destino de los tiempos y de perpetuarse en las catedrales de la biología y las pirámides del alma.


La poesía gira incansablemente y se agita desde el fondo misterioso de la mente y se plasma en las obras de los que construyen las acequias y cultivan los campos del futuro. Todo lo otro que se llame poesía tomando banderas incendiadas de espanto no es más que letra y palabra que se descompone sin remedio: lozana hoy, hedionda y estéril mañana. La poesía es pura, totalmente libre de todo pecado, comenzando por el pecado de ignorar la hermosura.


La poesía no tiene aditamentos para hacer de ella una imagen acorde con las reglas de los estilos, de las épocas o para congraciarse con el honor y la gloria y otros vanos espejismos.


La poesía ha crecido siempre, desde antes que la especie recorriera el planeta. Y seguirá existiendo después, cuando la historia sea puro recuerdo, y otros tiempos reemplacen a estos con nuevos ciclos y nuevos cielos.


Nadie puede colocarle una etiqueta, nadie puede comprarla ni venderla, porque ella es inaprensible, etérea, escapa de sus propios creadores y se proyecta más allá, hacia los nuevos territorios que la imaginación no alcanza a atisbar todavía: donde crece el silencio y se expande sin límites la vida.



Nos dice Roberto Aguirre Molina: "La poesía no tiene ligaduras" fue escrito y publicado para "eternidad de cálidas lágrimas", publicado en "ediciones delanada" en abril de 1980, una antología de 10 poetas jovenes santafesinos . El texto es de Jorge Cappato y lo fechó en marzo de 1980. Gracias ram.
Foto: Luis Carlos Aguirre y Jorge Cappato, San Miguel 1978





4 comentarios:

  1. La definición PERFECTA, la que me rebolotea el alma y que jamás hubiera podido dar con mis palabras, que hubieran sido:
    "lozana hoy, hedionda y estéril mañana."
    Inspirador texto para continuar sabiendo que el único límite son mis propias alas.

    Gracias por esto.

    MAGAH

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  2. Amigos, agrego esta data: En la antología de diez poetas jovenes santafesinos "Eternidad de Cálidas Lágrimas" que editara ediciones delanada en forma cooperativa en la ciudad de Santa Fe, en abril de 1980, participaron, además de Jorge Cappato, Leónidas Noriega con dibujos y poemas; Jorge Córdoba; Daniel Rafalovich, Jorge E. Reynals, Mirtha Cuevas, Ana María Niel, Mario Arteaga, Elda Storti, Omar Pogliani y yo.

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  3. el camino era el hacer, dia a dia.Escribir, reunirnos, vino de por medio, desafiando el miedo.No fue heroico, no.Fue vital en tiempos de muerte; luminoso en tiempos oscuros.

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Argensubte agradece tu comentario